martes, 19 de marzo de 2013

¿Miedo al dentista?




¿Así que le tienes miedo al odontólogo?
 No te preocupes. No eres la única persona que siente este. Muchos de nosotros inclusive lo negamos porque no es posible que alguien a nuestra edad tenga miedo de ir al mismo. Aún así, todavía existen aquellos que pondrán cualquier excusa para posponer la visita al médico de dientes. Aquí te presentamos unos consejos para que esta visita sea mucho más llevadera.
Pasos:
1.
Identifica la razón de tu miedo y analiza la situación.
Esto es muy importante. ¿Has tenido alguna visita al dentista que pueda haberte causado un trauma? ¿Qué es lo que dispara tu ansiedad, el consultorio, el olor a dentista, el sonido de la turbina? Quizás sea tu miedo a lo desconocido o tal vez al costo.
2.
Tómate el tiempo de buscar un dentista que te agrade y en el que puedas confiar. Pregunta a tus amigos acerca de la persona que está a cargo de sus dientes. Pregúntales qué clase de trabajos dentales ha hecho. cuál fue su experiencia con ese tratamiento, la cantidad de dinero que gastó, cuán bueno es el dentista a la hora de controlar el dolor o para hacer que el paciente se sienta relajado y confortable.
3.
No pospongas tu visita al dentista.
Mientras más veas a tu dentista, habrá menos que hacer.  Los controles frecuentes previenen graves problemas de salud bucal.
4.
Si no quieres escuchar lo que está pasando, lleva tu música al dentista.
Siéntate, coloca tus audífonos, cierra tus ojos y concéntrate en la música. Cuida de apagar el aparato cuando se te pida. Escuchar música relaja.
5.
Acepta el hecho que lo que más te asusta es lo desconocido.
 Las herramientas que manejan los dentistas pueden ser atemorizantes. Antes que tu doctor haga algo en tu boca, pregúntale lo que está haciendo y qué herramienta  va a utilizar.
6.
Reconoce el hecho que el dentista está ahí para ayudarte.
La persona que viste de blanco está allí porque estudió para eso y que no emitirá un juicio acerca de tu salud oral ni tampoco acerca de tí como persona. Lo único que desean es ayudarte a mejorar la salud de tus dientes.
7.
Recuerda que tienes el derecho a irte.
Si no te agrada el dentista que tienes ahora, es más que correcto irse. El primer paso es encontrar un dentista que realmente te agrade y en el que puedas confiar.
8.
Relájate:
Inhala lentamente y expande tu abdomen hasta contar cinco. Mantén el aliento por diez segundos y exhala contando hasta ocho. Repite este procedimiento cada vez que sientas que el nerviosismo se quiera apoderar de tí.
9. Lávate los dientes y usa hilo dental.
Una de las razones por que la gente no va al dentista es porque no se lava los dientes tan a menudo como querría. Nadie ve allá adentro hasta que vas al dentista. Pregunta a tu dentista por formas de lavarse los dientes eficientemente y pide que te recete un cepillo de dientes especial para tí. Quizá también desees que te recete una pasta de dientes.
10.
No esperes a tener dolor.
Cuando hay dolor, es problema seguro que no es pequeño. Controla tu salud bucal periódicamente evitando así malestares no deseados.
QUE EL MIEDO NO TE PARALICE. HOY PUEDE SER EL DÍA PARA COMENZAR A CUIDAR TU SALUD BUCAL!